sábado, 10 de marzo de 2012

El torrado

De la sombrilla está harto,
Tampoco visera tiene,
Sobre la arena se extiende
Y toma el sol cual lagarto.

También suele aplicarse a mares,
Gastándose un dineral,
Una cantidad brutal
De caras cremas solares.

Pues su objetivo mayor
Es ponerse más moreno
Que aquellos esclavos negros
Que plantaban algodón.

Y su espalda y su pecho
Somete a una exposición
Que ya parece un carbón
Pero aún no está satisfecho.


ya después de quemarse
Solo le falta una cosa:
Que si se pasa de rosca
Su cuerpo va a incendiarse.

Acudirán los bomberos,
La playa se llenará
Y los mirones verán
Como apagan al moreno.

Si su tumba visitáis,
La síntesis de su vida
Es ese epitafio a medida
Escrito por Muruais[i]:

«Aquí yace un español
Que se queja furibundo
Porque enterrado profundo
No puede tomar el sol.»
 

[i] Jesús Muruais Rodríguez (Pontevedra 1852-Idem 1903). Escritor, poeta, crítico literario y catedrático del Instituto de Pontevedra. El epitafio que reproducimos al final del poema fue publicado en Madrid, en la Revista Mundo Cómico, el 23 de octubre de 1875.

José M. Ramos. Agosto 2011